REFERENDOS
CONTRA LEGISLATIVOS
COLOMBOS
VENEZOLANOS
Por: Gustavo Osorio Vizcaíno
Fue relativamente sonoro el
mes pasado durante la tormenta política venezolana, la idea por parte de la
oposición de hacer un referendo revocatorio a la asamblea nacional, lo que
contrasta con la situación en Colombia del referendo impulsado por nueva ciudadanía.
Aun cuando en ambos casos se trata de iniciativas contra los legislativos
locales, existen en las dinámicas políticas y en el espíritu de las propuestas
diferencias sustanciales.
Inconformidad
real VS Inconformidad creada: En el caso de Colombia, sumada
la ya inconformidad histórica hacia el congreso de la republica, en el 2012 la
gota que rebosó la copa de la paciencia fue el intento de la reforma a la
justicia con sus “Micos” como la inmunidad casi total para los congresistas.
Reforma que en un inicio fue aprobada, y que gracias a la presión de la
ciudadanía, medios de comunicación con conciencia y 26 congresistas de todos
los colores políticos que no se dejaron comprar, ocurre un hecho nunca antes
visto en el país como lo fue la ejecución de sesiones extraordinarias en un
legislativo que no se caracteriza precisamente por trabajar, para la inmediata
cancelación de una ley aprobada días atrás.
En el caso venezolano la
idea de revocatoria se comunica por parte de Capriles (líder opositor), días
después de que la oposición sabotea una sesión parlamentaria, con instrumentos
de viento tan ruidosos como trompetas y Bubucelas, lo que redundó en una
Batalla física, donde no se sabe a ciencia cierta quien pegó primero y hubo
fuertes lesionados tanto del lado oficialista como del lado opositor. Apenas 2
días después de esto el principal líder opositor anuncia que convocará un
referendo revocatorio contra la asamblea departamental, y daba la certeza de
que “el 80, 90% de la población votarían el referendo[1]” cifra que en las circunstancias actuales del
vecino país donde hay un empate técnico entre el oficialismo y la oposición, el
pronóstico porcentual en mención es “pecar de inocente”. En general esta situación a todas luces
muestra la creación de un inconformismo casi de la noche a la mañana.
Bloque
político VS Ciudadanos y Líderes de Opinión: En el caso
venezolano quienes liderarían este proceso revocatorio, sería el fuerte bloque
de oposición en Venezuela quienes, como ya lo he dicho antes, son la mitad del
espectro político de ese país, pero quienes no necesariamente representan hoy
la opinión colectiva en relación a este tema. En el caso colombiano no hay
siquiera un partido político que represente así fuese el 10% del espectro
electoral colombiano. En Colombia hay una opinión pública indignada, un grupo de promotores y personas
del común denominado Nueva Ciudadanía, representados en el Congreso solamente
por el hoy Senador Más joven de Colombia Camilo Romero, y otros líderes de
opinión nacional que se han sumado a la causa.
Marco
Legal: En Venezuela hay un marco legal que les permite a los
ciudadanos adelantar elecciones ante el inconformismo ciudadano, en Colombia
apenas vía referendo se pretende crear
la ley para que se pueda revocar el congreso ante el inconformismo popular.
Conclusiones:
Luego de esta exposición de circunstancias y argumentos, es más que evidente
las diferencia y las motivaciones de ambas propuestas a pesar de que a una
primera vista parezcan lo mismo pero en 2 países diferentes, es más que
notorias las dificultades y el posible gran numero de opositores que les puede
salir a la propuesta, entre ellos desafortunadamente demócratas de verdad, en
el caso venezolano hay que esperar que dificultades nacen en el camino, antes
circunstancias adversas advenidas durante ultimas semanas, como lo es el caso
del cambio de línea editorial del canal de T.V. privado Globovisión en
otrora alienado fielmente con el
pensamiento de la derecha opositora en ese país.
Twitter:
@psicopolitico
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